El militar capturó la imagen del carrito de mercado al darse cuenta de lo que había dentro

Luego de pasar tiempo en el ejército, Patrick Gibson finalmente pudo reunirse con su esposa Whitney y sus dos nuevos hijos. Comprendía la difícil situación financiera, por lo que siempre trató de ser ahorrativo. Pero, estando en un supermercado de Carolina del Norte, tuvo una experiencia algo molesta que compartió en Facebook, sin imaginar que se volvería viral.

Sentido del bien y el mal

Sin muchas alternativas profesionales en su juventud, Patrick Gibson ingresó al ejército de los Estados Unidos. Allí encontró un propósito de vida y desarrolló un estricto sentido del bien y el mal, que lo llevó a reaccionar como lo hizo ese día en el supermercado. 

Pensando en progresar

Teniendo en mente la economía, al finalizar su servicio buscó un empleo que le permitiera vivir holgadamente junto a su familia. Como muchos otros ciudadanos estadounidenses, se unió a la clase trabajadora para ganar dinero. Aunque no gozaba de lujos, le iba bien y valoraba su trabajo.

Nueva ruta de vida

Convencido de iniciar un nuevo camino y de que su novia Whitney era la mujer indicada para él, le pidió matrimonio. Deseaba comenzar formando una familia. Estaba seguro de que serían felices si se lo proponían.

Dos hijos

Al poco tiempo, la pareja tuvo un niño y una niña, por lo Gibson se vió obligado a trabajar más duro para mantener su hogar. Ahora eran cuatro y estaba decidido a salir adelante.

Único sostén familiar

Gibson estaba bajo una tremenda presión por ser el único generador de ingresos. Llegar a fin de mes y satisfacer las necesidades de su esposa e hijos, implicaba muchos sacrificios como, por ejemplo, saltarse el desayuno. 

Salir a flote solo

Se dedicó tanto al trabajo que no tuvo necesidad de solicitar ayuda, ni siquiera a sus padres o al gobierno. Aunque en algunas situaciones es la mejor opción para sobrevivir, Gibson era demasiado orgulloso. Eso estuvo bien, hasta cierto día que visitó el supermercado.

Compra estratégica

Entró en una tienda de Fayetteville y recorrió los pasillos en busca de lo básico. Su situación económica no le permitía adquirir cosas más allá de las presupuestadas. Por eso, hizo una compra estratégica.

Buscando ofertas

Mientras trataba de encontrar descuentos especiales en los productos, se dió cuenta que otros compradores no se fijaban en los precios. En realidad, no les importaba hacer compras inteligentes para ahorrar dinero como él. 

Cargamento llamativo

Esto se hizo más evidente al finalizar su compra. Estando en la fila para pagar, no pudo evitar ver a alguien delante de él con un cargamento muy particular. No parecía encajar con la situación.

Un carrito lleno

Tenía un carrito hasta el tope con toda clase de comestibles. A Gibson le preocupaba ver lo lleno que estaba. Pero eso no despertó tanto su interés como el comportamiento del cliente.

Artículos de lujo

Además de llevar muchas cosas, la mayoría de los artículos escogidos eran de lujo. Incluían tocino, bistec y camarones, algo que él no podía comprar regularmente al tener una familia que mantener. Cabe destacar que no sentía envidia en lo absoluto.

Cuenta de $800

La compra de la persona misteriosa frente a la caja del supermercado sumó alrededor de 800 dólares. Gibson se quedó perplejo por la cantidad de comida adquirida. Pero lo que sucedió a continuación lo dejó sin palabras, al igual que al cajero de la tienda.

Tarjeta EBT

El cliente sacó una billetera llena de fajos de billetes y decidió efectuar el pago con su tarjeta EBT, la cual beneficia exclusivamente a personas de bajos ingresos. Entonces, Gibson, quien iba a pagar en efectivo, sintió que esa persona estaba llevando comida gourmet gratis.

Descubrimiento

Sin decir nada, siguió al comprador hasta el estacionamiento. Para su sorpresa, también tenía un auto nuevo, por lo que parecía obvio que no era alguien necesitado.

Injusticia

A Gibson no le pareció justo que esta persona se aprovechara de la ayuda del gobierno. Pues, tenía mucho dinero en efectivo para gastar. En cambio, él debía trabajar duro para mantener a su familia. Y no se quedó tranquilo hasta hablar.

Plan frustrado

Sabía que era arriesgado decir algo porque había mucha gente en la tienda y largas colas. No pretendía empeorar la situación, pero le resultó imposible contenerse. Las cosas no salieron como planeó el cliente.  

Publicación en Facebook

Una vez más demostró ser un caballero, al no dirigirse directamente al comprador. A pesar de su enojo, mantuvo la compostura y solamente tomó unas fotos. Al llegar a casa, las publicó en Facebook con un comentario de lo que había presenciado. Esperaba no ser el único en rechazar tal comportamiento.

Mensaje viral

Lo que no imaginó es que su publicación se volvería viral. Más de 150.000 usuarios de la red la compartieron después de leerla. En cierta forma, se sintió aliviado, pero algunas opiniones lo disgustaron.

Opiniones controversiales 

A pesar de que recibió mucho apoyo, no todos los que vieron su post estuvieron de acuerdo con él. Algunos opinaron que su reacción fue exagerada y que no podía juzgar a un extraño sin fundamentos. En realidad, no sabía de dónde obtuvo el dinero y si el auto fue un regalo. 

Respuesta diplomática

Patrick respondió diplomáticamente, dejando en claro que mucha gente depende de la ayuda del gobierno. Además, reiteró su posición respecto a quienes cometen fraudes. Para él, son antiestadounidenses. Pero las personas comentaron un detalle que él no había considerado algo.

Un punto clave

Uno de sus críticos le recordó que ninguna persona tiene por qué agradecerle a nadie por trabajar para pagar sus facturas del supermercado. Y que la mayoría de las familias que participan en el programa son trabajadoras como él. 

Buenos samaritanos

Es entendible la posición de Gibson, pero es cierto que existen buenos samaritanos. No todas las personas buscan engañar al sistema. Seguramente, el militar apoyaría a un compañero del ejército que lucha contra el orgullo.

Visión aterradora

Luis Ocampo, miembro de la Guardia Nacional, sabe por experiencia que pertenecer al servicio militar es honorable, pero no te hace rico. Cuando regresó a casa después de una misión peligrosa, una visión lo dejó sin palabras. Una semana antes se enfrentó a un devastador huracán. Ahora, a una pesadilla. 

Tormenta Florence

La tormenta Florence, de categoría 1, afectó severamente la costa. Dejó ciudades inundadas y casas destruidas. Tocó con mayor fuerza a New Bern, a donde la Guardia mandó a Luis para participar en las labores de ayuda. 

Secuelas del huracán

Mientras él y sus soldados brindaban ayuda a los necesitados, su esposa Kailey, de 20 años, se trasladó a un lugar seguro con el bebé Lucian, para mantenerse a salvo.

Lejos de la mascota

Específicamente, a la casa de sus suegros para no quedarse tanto tiempo solos. Sin embargo, no pudo llevar consigo al perro.

Sin descanso

Luis regresó a su hogar el 21 de septiembre, deseando tomarse al menos unas horas de merecido descanso. Pero se encontró con una sorpresa.

Curioso recibimiento

En lugar de Kailey, quien seguía en la casa de sus padres, lo recibió la mascota. Lo extraño es que estaba en el patio delantero, a pesar de haberlo dejado adentro por su seguridad. Tendría que haber un paso libre para terminar afuera.

Puerta abierta

En efecto, la puerta estaba completamente abierta. Luis pensó en varias posibilidades. O el perro logró abrirla por sí mismo, o a su esposa se le olvidó cerrarla. Pero estaba seguro de que no era así. Lo más probable es que fuera un extraño. 

Un ajeno en casa

La ventana de la habitación de su bebé también estaba abierta y con la cerradura rota. Entonces, confirmó que alguien se había metido a la casa, aunque desconocía si seguía allí.

En busca del intruso

Luis accedió a su casa a través de la puerta trasera abierta y observó cuidadosamente todo. Estaba acostumbrado a enfrentar situaciones estresantes, pero no deseaba toparse con alguien peligroso. Tras una exhaustiva búsqueda se dió cuenta que no había nadie dentro. Eso fue lo único bueno.

Saqueo completo

El intruso robó varios objetos como su computadora portátil, el equipo de videojuegos, un arma de fuego y la comida del refrigerador. Además, causó numerosos daños y dejó ropa tirada por todas partes.

Pérdidas devastadoras 

Entre las pertenencias robadas, estaba la colección de monedas de su abuela, la cual tenía un enorme valor sentimental. A sus 24 años, la vida de Luis y su familia ya era lo suficientemente dura. Ahora, debía empezar de nuevo por culpa de los ladrones. 

Estado de Facebook

Kailey encontró a su esposo devastado cuando regresó a casa. Entonces, sin consultarlo con Luis, escribió un estado en Facebook contando su situación. Sabía que no estaría de acuerdo, pero quiso hacer algo para ayudar. Eso cambiaría luego sus vidas. 

Corriendo la voz

La publicación decía que “su soldado” perdió todo lo importante para él. A la vez, pedía compartir la historia, para ver si alguien se motivaba a ayudarlos a encontrar a quien lo robó.

Amiga solidaria

Mary Elise Capron, amiga de Kailey, sintió pena por la pareja a la que conocía desde hace tiempo. De hecho, trabajó con Luis varios años y sabía que era una buena persona.

GoFundMe para Luis

Queriendo ayudar, creó una cuenta de GoFundMe para Luis, explicando su terrible situación. Lo describió como un servidor dedicado, un padre amoroso, buen estudiante y trabajador. El robo puso en riesgo su carrera, educación y la seguridad de su familia.

Donaciones a raudales

Mary estableció una meta de recaudación de fondos de 5.000 dólares. Esperaba que alcanzara para reparar los daños a la vivienda y reemplazar algunas de las pertenencias robadas. Las generosas donaciones no dejaron de llegar.

Comunidad generosa

En apenas 11 días, la pareja recibió miles de dólares a través de GoFundMe. Por ello, le pidió a su amiga cerrar la cuenta para no abusar de la generosidad de la gente. La comunidad también superó con creces las expectativas de Kailey en Facebook.  

Cambio de plan

Sorprendentemente, el público le rogó a Mary reabrir la recaudación de fondos para seguir ayudando al soldado y su esposa. Luis se sintió incómodo con esto, por lo que decidió tomar solo lo que necesitaba. El resto del dinero lo destinó a otra causa digna.

Fondos redirigidos

Aprovechando el interés de la gente en ayudar a los necesitados, dirigieron las nuevas contribuciones al Fondo de Asistencia para Soldados y Aviadores de la Guardia Nacional. Muchos miembros pasan también por momentos difíciles.

Gran aporte

Incluso, donaron parte del dinero recibido, cuyo monto ascendió a $15.000, para ayudar a un soldado víctima del huracán Florence. Un árbol cayó sobre su casa, por lo que estaba viviendo en un cuarto de hotel. Luis y Kailey no dudaron en dárselo.

Un ejemplo a seguir

Luis dijo que la generosidad de los donadores fue lo que lo inspiró a ayudar a los demás. Hasta en los peores momentos siempre hay alguien dispuesto a colaborar. Él y su esposa también motivaron a otras personas a hacer lo mismo.